domingo, 7 de octubre de 2018

Anonimo


Cuando tenía 19 años tuve la suerte de ser aceptado en casa de personas que me tomaron
confianza por haber tenido una relación amorosa con una de sus hijas, me consideraron
tanto porque cuando hacía falta algo en la casa yo lo ponía, nunca me mostré interesado y
creo que esa es la razón de confiar en mí o ellos sabrán.
Mi novia me engañó con alguien más y terminó casándose y preferí tenerla de amiga que
de enemiga.
Cuando me instalé en esta casa dormía en un pequeño colchón que todas las noches
tendía en la sala hasta que llegó el padrastro de los niños, él y la señora de la casa tenían
problemas y no dormían juntos, aunque todas las mañanas, gracias a mi sueño tan liviano,
yo podía notar cómo ella bajaba al primer piso y se quedaba en la sala por
aproximadamente media hora, yo ya lo tenía tan de costumbre que volvía a dormirme por la
normalidad del caso.
Esta hija, la llamaremos Ana, tenía un novio, y yo actualmente trabajaba y llegaba después
de las 19:00, cuando yo llegaba Ana me decía que le prestara mi teléfono para jugar, yo
accedía porque para mí no era problema, pero terminaba siempre entrando a mi cuenta de
Facebook y ver las noticias, tampoco eso me quitaba el sueño.
Un día descubrió que yo tenía agregado a su novio y quiso hablar con él, yo le dije que
estaba bien y que eso no me hacía daño, pero después se tornaba un poco incómodo ver
penes que no eran míos en mi cuenta, por eso le dije que le iba a crear una cuenta para que
se comuniquen entre ellos.
Pasaron los días y yo me estoy dando cuenta que ella me guarda cosas cuando vengo de
trabajar, intenta mantenerme contengo para que yo le preste mi teléfono, pero yo ya no
quiero sus cosas materiales y me estoy poniendo algo irritante a propósito y le digo que se
lo presto a cambio de juguetear con su cuerpo, al principio no accedió pero yo soy su
salvación para hablar con su novio, accede pero con una condición, ella no haría nada con
mi cuerpo sino sólo yo experimentaría con el suyo, me pareció muy bien pues yo sabía que
accedería con el tiempo.
Todos se iban a dormir y yo aprovechaba para bañarme después de las 23:00 en el patio de
la casa, ella siempre "tenía calor" y se quería bañar a esa hora, salía en toalla esperando su
turno pero se abría la toalla y yo en las penumbras podía ver las siluetas de unas tetas de
señorita y una vagina afeitada, por mi cuerpo corría algo raro y me empezaba un temblor
aunque trataba de no perder la compostura.
Una noche se hizo la dormida y yo empecé a manosearla, sabía que se estaba haciendo
porque su sueño no pesaba tanto, pero me hice el tonto y le tocaba las tetas, estaba
jugando con ese paraíso de señorita, olvidé mencionar que ella tenía 15 primaveras y no
estaba usada aún, yo cómo veía que aún no se despertaba seguí tocando, mi
desesperación fue grande cuando toqué su vagina y estaba totalmente mojada, me saqué
mi miembro y me empecé a masturbar mientras veía cómo se la iba a mamar, con
movimientos sigilosos fui hacia sus piernas y las empecé a abrir, estaba siendo lo más
silencio que pueda porque la habitación de la madre está al final del pasillo y el baño
quedaba en la parte baja de la casa, si esa señora se levantaba yo era hombre muerto, pero
nadie se levantó, entonces se la empecé a mamar, una de las vaginas más suaves que he
probado, su olor era diferente y el morbo de estar manándole la concha a una menor era
sublime, sus piernas se movían como loca, parecía que le estaba dando una descarga
eléctrica, sus jugos no dejaban de salir y yo los saboreaba todos, en ese instante escuché
un movimiento de algo y la tapé y me hice el dormido, luego ella se volteó y ya no quise
seguir molestándola, pero fui al baño y me hice tremenda paja, sólo lo saqué y ya me
estaba viniendo.
Luego otro día se fue la luz y yo decidí dormir en la sala, la parte de abajo, ya que su
padrastro se había ido por los problemas con su madre, cuando terminé de usar mi celular
lo guardé e intenté dormirme, nunca escuché pasos pero alguien está tentando como
buscando algo, yo no sabía quién era pero me estuve imaginando que era Ana, no dije nada
y ella sigue tentando, parece que supo qué parte de mi cuerpo tenía en sus manos y yo las
sentía en mi pecho, luego empezó a bajar lentamente hasta llegar a mis calzoncillos, me
sacó mi miembro y lo empezó a mamar, una adolescente me lo está mandando todo mal
pero lo está haciendo, sus dientes me rozaban y me dolía pero no dije nada, cubrí mi boca
para que no se escuchen los gemidos de dolor y ella seguía mamando, luego me
acostumbré y bajé mis manos hasta su pecho, estaba sin brasier y sus tetas colgaban, las
apretaba con fuerza y Ana me lo mamaba con locura, un caliente sentía correr por mi
cuerpo cuando toda mi leche calló en su boca, ella se fue sin dejar que me termine de venir
y subió para la habitación y ahí estaba yo todo lleno de leche, me dolía el miembro pero
estaba seguro de haber disfrutado lo que pasó.
Después de eso no volvimos a estar pero ahora somos amigos, lo mejor es que nadie se
imagina eso que pasaba y yo sigo visitando esa casa y todavía me guardan el respeto, Ana
ya se casó y tiene una hermosa hija, no hablamos del tema pero fue una linda etapa en mi
vida... Tengo más relatos aunque no con ana, le caigo en gracia a las personas.

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