domingo, 7 de octubre de 2018

Polvo en el Gimnasio

Soy piel morena de 26 años y en ese entonces tenía cuerpo convencional, sin muchas
nalgas ni piernas, pelo largo negro, ojos cafés senos perfectos mido 1.20.
Decidí ir al gimnasio porque vi que era la moda y no hacía nada en casa después de mi
trabajo de medio tiempo como contable, siempre terminaba en las redes sociales y viendo
alguna serie de tv, el primer día de gym fue un poco complicado y vergonzoso y esa
vergüenza me duró aproximadamente una semana, luego de la semana ya me siento como
alguien vieja en el negocio y ya nada me causaba vergüenza, poco a poco veía cómo mi
trasero aumentaba, se notaba porque ya los pantalones me apretaban, tuve que cambiar de
talla por lo mismo.
Un día del gimnasio vi a este joven cuerpo atlético como esos que salen en las revistas de
avon, y una de las compañeras empezó a hablarme de él, resultaba que era el dueño del
gym y su nombre era Alex, era alto y sus brazos estaban muy ásperos, nada exagerado por
cierto, tenía unas piernas gruesas y su abdomen muy plano, me dije a mí misma: tengo que
ligarme a Alex.
Un día iba saliendo del baño y para casualidad venía entrando Alex , nuestras miradas
chocaron y quise poner una conversación y le pregunté si realmente era el dueño y me
respondió muy amablemente que sí, yo le dije que debería cambiar una de las máquinas y
se la señalé y me preguntó por qué, luego yo le dije que viniera conmigo a ver, estaba
agarrando de la mano al dueño del gym y noté que las chicas se quedaron mirándome
como si me odiaran y yo me creía más que ellas, cuando llegamos a la máquina le dije la
verdad, le dije que le estaba mintiendo y que sólo quería que sea mi instructor por ese día y
que me enseñe bien las sentadillas, él sonrió y me dijo okey, tomó mi cintura y me puso de
espaldas hacia él y me iba bajando el cuerpo y diciéndome cómo debía hacerlo, sus manos
grandes casi tocaban sus propios dedos, mi cintura cabía en las palmas de sus manos y me
sentía tan pequeña en ellas, después de unas cuántas sentadillas le dije que quería
adelantar el pago de la suscripción y me dijo que fuera a caja, yo le dije que no quería pagar
en caja porque quería hablar de los beneficios de los que pagan a tiempo y que quería que
me los explique él y que fuéramos a su oficina, fuimos a su oficina y fue al baño de la oficina
y yo no sabía lo que iba a hacer, lo único que se me ocurrió fue entrar en el baño y estaba
todo desnudo, este monumento de hombre duchándose con su cosota al aire naturalmente
se estaba cubriendo al verme entrar pero yo me le acerqué y le dije tengo ganas de hacerlo
contigo y él dijo que tiene esposa e hijos y yo le dije pero es un rapidín solamente y le toqué
su pene y lo estaba manoseando y él me dejaba mientras el agua corría por nuestros
cuerpos, besé sus labios carnosos y me pasaba su pene por mi vagina mientras sus
gigantes manos quitaban mi deportivo descubriendo mi trasero, besaba su cuello y lamía
sus tetas e iba bajando hasta que llegué a su pene, lo miraba pues me resultaba increíble
su tamaño, no era un monstruo pero estaba todo lleno de venas y tenía su punta color
chocolate y empecé a manársela, qué sensación sentía mamando ese pene, se sentía en
en mi boca mientras veía cómo se tocaba sus tetas yo le estaba tocando sus duras nalgas
cuando él se agachó y empezó a tocarme mis nalgas ya descubiertas, no lo podía creer,
después levantó mi cuerpo como si yo fuera un papel y me puso en la posición del 69 pero
de pie, nunca me la habían mamado cómo lo estaba haciendo Alex, me desconcentraba y
no podía chupar su pene bien, me sostenía con un brazo y con la otra mano me estimulaba
el punto g mientras su lengua jugaba con mi clítoris, me sentía toda caliente y perra al
mismo tiempo y llegué al orgasmo unas 3 veces, me sentía en la gloria, después me cargó
en sus brazos y me llevó hasta su escritorio y allí me puso en 4, me estaba mamando mi
vagina y yo casi lloraba de placer, no pude hacer otra cosa que tocarme mis tetas mientras
pedía más, no pares, no pares le decía hasta que le tuve que decir que me penetre y se lo
pedí unas 15 veces y después él accedió, escupió su mano y la frotó con mi vagina,
después volvió a escupir y ahora se la ponía en su venoso pene, muy lentamente se estaba
abriendo paso en mi vagina como si fuera suya, yo no aguantaba tanta paciencia y le agarré
su cintura y la estaba halando hacía mí para que me penetre con rudeza pero él quitó mi
mano y la juntó con la otra y llevó mi cabeza al escritorio mientras mis manos estaban
atadas con la suya en mi espalda baja, después tomó mi pelo y me estaba penetrando con
violencia mientras yo me volvía loca, me lo estaba clavando como un experto, yo sentía
como mis jugos salían sin parar y mis pezones se ponían duros como piedra, la posición en
la que estaba me estaba generando mucha calentura y tuve dos orgasmos más, tuve 5
orgasmos en un solo día en menos de 1 hora, sentía la rigidez de mi clítoris como si fuera
un pene, después de al menos 12 minutos de una buena cogida Alex sacó su pene y sentía
gotas de algo líquido caliente en mi espalda, sabía que era semen pero no sabía que podía
salir tanto.
Alex ya no quería que esto se repita y yo traté de evitarle inconvenientes pero se daba con
mucha frecuencia jijiji.

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